Geopatías, entidades, y otros factores energéticos
Nuestro entorno tiene un impacto significativo en nuestro bienestar energético. No solo estamos influenciados por las personas con las que interactuamos o los lugares que frecuentamos, sino también por energías más sutiles y difíciles de detectar. Las geopatías, las entidades energéticas y otras influencias tóxicas pueden afectar negativamente nuestro campo energético, creando bloqueos, desequilibrios y enfermedades. Entender estas influencias externas y aprender a protegernos de ellas es esencial para mantener un flujo de energía saludable.
1. Geopatías: energías de la tierra
Las geopatías se refieren a las energías naturales de la Tierra que pueden tener un efecto perjudicial en el bienestar humano. Estas energías provienen de variaciones en el campo magnético terrestre, corrientes subterráneas de agua, fallas geológicas, o radiaciones naturales del suelo. Vivir o pasar mucho tiempo en un área con fuerte geopatía puede resultar en problemas de salud física, insomnio, ansiedad y un agotamiento general de la energía vital.
Ejemplo de geopatías comunes:
– Líneas de agua subterránea: Corrientes de agua subterráneas que fluyen a través de fallas geológicas pueden crear campos de energía disruptivos. Dormir sobre una de estas corrientes puede afectar la calidad del sueño y el sistema inmunológico.
– Nudos geopáticos: Encrucijadas de líneas magnéticas de la Tierra, también conocidas como nodos de Hartmann o Curry, pueden ser puntos de alta radiación natural. Estar expuesto a estos nodos durante largos períodos puede causar enfermedades crónicas y fatiga.
2. Entidades energéticas: presencias no físicas
Las entidades energéticas son formas de energía que no tienen un cuerpo físico, pero que pueden influir en el campo energético humano. Estas entidades pueden ser remanentes de energía emocional, como las generadas por traumas o conflictos intensos, o pueden ser energías de seres que no han encontrado la paz después de la muerte. Las entidades energéticas a menudo buscan alimentarse de la energía de personas vivas, especialmente aquellas que son sensibles o tienen campos energéticos débiles.
Síntomas de influencia de entidades:
– Sensación de pesadez o frío en ciertas áreas.
– Sueños perturbadores o pesadillas recurrentes.
– Sentimiento de ser observado o invadido.
– Cambios de humor inexplicables, agotamiento repentino o pérdida de energía.
3. Energías ambientales tóxicas
Además de las geopatías y entidades, estamos expuestos a una variedad de energías ambientales que pueden afectar nuestro bienestar. Esto incluye la radiación electromagnética de dispositivos electrónicos, el ruido ambiental, la contaminación del aire y la energía emocional acumulada en lugares donde han ocurrido conflictos o violencia.
Impacto de energías ambientales tóxicas:
– Radiación electromagnética: La exposición prolongada a campos electromagnéticos (CEM) de teléfonos móviles, routers Wi-Fi y otros dispositivos puede afectar el sistema nervioso y el campo energético humano. Esto puede manifestarse como dolores de cabeza, problemas de concentración, fatiga y trastornos del sueño.
– Energía emocional acumulada: Los lugares donde han ocurrido eventos traumáticos o violentos pueden retener la energía emocional de esos eventos. Al entrar en estos espacios, podemos sentirnos inexplicablemente deprimidos, ansiosos o irritados.
Limpieza ambiental y protección áurica
Para protegernos de influencias externas y tóxicas, es crucial adoptar prácticas de limpieza y protección energética. A continuación, se presentan algunas técnicas y herramientas efectivas:
1. Limpieza energética de espacios: Mantener los espacios limpios energéticamente es fundamental para un bienestar óptimo. La quema de incienso, como el palo santo o la salvia blanca, es una práctica tradicional para limpiar energías negativas. Otras técnicas incluyen el uso de cuencos tibetanos o campanas para generar vibraciones de sonido que disuelvan la energía estancada.
2. Protección áurica: Proteger nuestro campo áurico de influencias externas es esencial. Visualizar una burbuja de luz blanca o dorada que nos rodea puede actuar como un escudo energético, repeliendo influencias negativas. Llevar cristales protectores, como la turmalina negra o la amatista, también puede ayudar a mantener nuestro campo energético limpio y fuerte.
3. Desintoxicación electromagnética: Reducir la exposición a campos electromagnéticos es clave para proteger nuestra salud energética. Apagar dispositivos electrónicos cuando no se usen, utilizar protectores de pantalla de CEM y mantener los teléfonos móviles lejos del cuerpo, especialmente durante la noche, puede minimizar la influencia de estas radiaciones.
4. Técnicas de enraizamiento: Las técnicas de enraizamiento, como caminar descalzo sobre la tierra o meditar visualizando raíces que se extienden desde nuestros pies hacia el centro de la Tierra, ayudan a descargar la energía negativa acumulada y a conectarnos con la energía estabilizadora de la Tierra.
5. Purificación personal regular: Baños de sal, especialmente con sal marina o sal de Epsom, pueden ser efectivos para eliminar la energía negativa del cuerpo. También se puede utilizar agua con intención de purificación, como agua bendita, para rociar el cuerpo y los espacios.
Limpieza y protección continua
La protección contra influencias externas y tóxicas no es una tarea única; requiere un mantenimiento constante. Estar consciente de las energías a las que nos exponemos diariamente y tomar medidas para protegernos y limpiar nuestro campo energético es esencial para mantener un estado de equilibrio y salud integral. Al integrar estas prácticas en nuestra vida diaria, podemos asegurarnos de que nuestro entorno apoya nuestro bienestar y crecimiento personal.
Conclusión
Las influencias externas y tóxicas pueden tener un impacto significativo en nuestra salud energética y bienestar general. Al entender y reconocer estas influencias, podemos tomar medidas proactivas para protegernos y mantener un campo energético limpio y equilibrado. Las prácticas de limpieza y protección energética no solo nos ayudan a evitar las energías negativas, sino que también fortalecen nuestra conexión con nuestra esencia y promueven una vida de armonía, claridad y paz.
Nota: La influencia de las geopatías y energías ambientales en la salud humana es un área de estudio tanto en disciplinas esotéricas como en investigaciones científicas sobre bienestar ambiental y salud pública.